sábado, 6 de marzo de 2010

Generalmente no uso mucho el entrepiso/Parte I


Estoy buscando alternativas para fluir mejor en los diferentes aspectos de mi vida. Quiero que estas palabras que tratan de conectar los cadáveres cambien. No voy a usar más los títulos de éstos para escribir la historia del blog, o mejor dicho lo que me pasa a mí con estos muertitos.

Lo estoy cambiando sobre la marcha, no se que sigue a continuación de cada palabra que escribo. Tengo la sospecha de que va a quedar un poco falto de contenido, pero tal vez sea un reflejo de cómo me siento yo por estos tiempos.

Leí por ahí que para poder cambiar y potenciar las formas de percepción del mundo uno debe vaciar el almacén de vivencias que tiene adentro, recordando a cada persona que conoció en su vida y, con una suerte de ejercicio, eliminar el recuerdo de su estantería mental. Lo llaman recapitulación y tiene que ver con la brujería mexicana. Me resulta un poco extremo, pero me deja pensando cuanto tiene que ver con ciertos tipos de terapias a las que estamos acostumbrados por estos lados. Y además me pregunto hasta donde lo que conocemos y creemos útil y real es así. Que fuerte es la socialización que vivimos desde antes de nacer, que nos marca tanto y nos aprisiona en un único mundo mental del cual a veces es necesario salir para conectar con lo que realmente nos pasa.

Otra cosa que leí en un movilizante blog de poesías, el cual creo que se llama quimera o enquimera, fue el siguiente verso: no entender es dar la vuelta al día en 80 mundos. Automáticamente se me vinieron a la cabeza la cantidad de viajes al día que hacemos por el pasado, el futuro y los millones de mundos posibles que nos imaginamos si tal o cual cosa sucedieran. Esta idea se vuelve aun más potente si esto lo multiplicamos por la cantidad de personas y los mundos que habita cada ser en este planeta. Pensamiento que me transportó directamente a la sensación que te genera no entender algo de verdad.

Y con algunas de estas cosas en la cabeza, luego de un verano que me llevo por delante con momentos maravillosos pero con la chota sensación de que no hago según mi deseo (por mas que me pasen cosas que tengan que ver con este), y también con esto de no encontrarme, arranco un año con olor a revueltas. Ese olor a experiencia sin usar que ya se vence pero que todavía ocupa un lugar en el almacén y no puede entrar otra. Un año en el que probablemente me mude de este hermoso lugar en el que vivo, siendo además conciente del poco uso que le doy al entrepiso, con lo que me gusta!

Imagen: Murakami

3 comentarios:

  1. Aunque yo amo a mis infinitos pensamientos que me atacan y sorprenden cada dos segundos...disfruto paralelamente de la ignorancia...solamente estar en blanco, borrar todo tipo de no se que...es un 2 x 1...o un 800 x 1 quizás jajaj...en fin...un número infinito diría yo que hace a UNO...y me apasiona que sea así
    saludos!

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  2. lindos extremos para transitar mientras se busca el equilibrio para volver a perderse de nuevo y así todo el tiempo...y lo mejor es que sea apasionadamente!
    Beso!

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  3. Seres apasionados, revolcando el corazón por pocos pesos, por la droga infame de un beso. Ahora estamos jugados con toda la carne puesta en el asfalto... con el riesgo de kedar sin sangre, de perder la juventud de golpe. Pero k carajo importa ,,,de un extremo a otro transcurre la vida...

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